Uno no sabe, lo que echa de menos a alguien,
hasta que no lee sus artículos. Esto me está pasando, con el libro
póstumo de David Gistau" El penúltimo Negroni” La portada del libro, es la
cara bonachona, sonriente de Gistau, que murió en 2020; dejándonos huérfanos a miles de lectores, quienes ahora
buscamos en sus palabras, mundos, creados dentro de su experiencia, que saltan
hasta nuestra fantasía, para tamizarla con sensaciones, son sabores, con
idiomas con los que establecemos, diálogos, invisibles, con respuestas mudas de
un hombre bueno, que se fue al otro de la verdad; pero que nos legó su corazón
de soñador, al que recurriré siempre que necesite un consejo.
Gracias David por emocionarme, con
admiración a su memoria.
Ana Tapias( todos los derechos reservados)©
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